A raíz de un artículo que publicamos el otro día sobre la ciudad de Nantes (Francia), en el cual hablaba de como en esta ciudad se ha cambiado el concepto de espacios urbanos y jardinería dejando que crezcan las hierbas adventicias y salvajes, queremos lanzaros una propuesta colectiva:
Cuando salgáis a la calle y paséis por alguna zona verde más silvestre de lo habitual, o por un pequeño reducto de naturaleza salvaje que ha crecido espontáneamente en nuestra ciudad, sacarle una foto y enviárnosla a nuestro correo o a nuestra redes sociales etiquetándonos en la foto:
Cuando salgáis a la calle y paséis por alguna zona verde más silvestre de lo habitual, o por un pequeño reducto de naturaleza salvaje que ha crecido espontáneamente en nuestra ciudad, sacarle una foto y enviárnosla a nuestro correo o a nuestra redes sociales etiquetándonos en la foto:
segoviaxelclima@gmail.com o @Sgxelclima para intagram y facebook.
Las fotos que nos enviéis las iremos publicando en nuestras redes durante los próximos meses
Con esta iniciativa queremos recuperar la importancia en las zonas urbanas de los espacios verdes, pero no sólo jardines y árboles que salen de pequeños alcorques en el cemento, sino de unos espacios verdes más naturales, con plantas autóctonas y que salen de forma natural, con todas sus flores en primavera, dando alegría y color a la ciudad. Plantas que no necesitan tantos cuidados y que favorecen la biodiversidad de nuestras ciudades, generando además corredores naturales.
¿El porqué de esta iniciativa?
Creemos que las "buenas hierbas" adventicias que crecen de manera natural no son malas hierbas como se las tienen estigmatizadas. Su presencia mejora nuestra salud e inconscientemente la percepción de nuestro entorno urbano haciéndolo más hermoso, apacible y aportándonos tranquilidad. Es un hecho muy recientemente comprobado durante la cuarentena que estamos viviendo, que necesitamos de la naturaleza. Todos y todas hemos salido a dar un paseo en cuanto que hemos podido al espacio verde más cercano de nuestra casa, y es que somos naturaleza y esta nos aporta mucho más de lo que nos pensamos.
Una ciudad que respete más los ciclos naturales de plantas anuales o de plantas silvestres, es una ciudad con una calidad ambiental mayor, con unos espacios urbanos que aportan paz y sosiego, psicológicamente provoca en nosotros un estado mental totalmente distinto al que estamos acostumbrados con las ciudades de cemento y hormigón, grises y desalmadas. Necesitamos de la naturaleza y ahora empezamos a ser conscientes de ello.
Además cambiar el paradigma de la jardinería urbana podría suponer ahorros en cuanto al gasto de agua y al tiempo que se invierte en su cuidado, pudiendo dedicar este en otro tipo de iniciativas, como por ejemplo generar más espacios verdes, espacios de huertos colectivos, desarrollar vías verdes que comuniquen Segovia con los pueblos vecinos, hay infinidad de posibilidades. Por si queréis ver el ejemplo de Nantes desde hace ya algunas décadas os dejamos el artículo a continuación.
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